Aunque a Venezuela se le considera un país esencialmente católico y que en la Constitución de 1999 se garantiza la libertad de religión y culto (para no centrarla sólo en el catolicismo apostólico romano que es el más preponderante), sólo un porcentaje reducido de la población total va regularmente a la Iglesia.
La religión o religiosidad está expresada de diferentes
maneras:
1)
Catolicismo ortodoxo: es la religión practicada por una minoría que a
menudo son los fieles educados que pertenecen a la clase alta y media de la
sociedad. Sus hijos van a escuelas católicas privadas, toman una parte activa
en la vida parroquial, pertenecen a grupos religiosos como Hijos de María, Grupos de Mujeres, Opus Dei.
2)
Catolicismo popular: Se trata esencialmente de cultos de religión fervientes
para los santos, que tienen aspectos utilitarios. Quizás algunas prácticas
provienen de África o de tradiciones indígenas. Los símbolos católicos se
interpretan de manera especial.
3)
Devoción a las Ánimas: Los cultos no son reconocidos por la Iglesia Católica; tienen aspectos
utilitarios.
4)
Movimientos
espirituales: El culto de
María Lionza, la santería cubana, kardecismo. A veces se invocan no
sólo los espíritus y divinidades, sino también las ánimas que se manifiestan en
médiums y que pueden ser consultadas por los fieles.
5)
Sectas pentecostales: De gran crecimiento en el país gracias a pastores y
personas seguidoras que traen sus conocimientos, formatos y bondades desde
otros países. Ofrecen a las personas puntos libres entre su reflexión y la
religión para un estudio vivencial personal y de transmisión a quienes
consideren requieran de su apoyo.
La religión tiene puntos de unión
No
existen grandes diferencia entre las cuatro primeras y la última, formas de
religión o religiosidad popular. Más bien se puede hablar de un continuo que de
paralelismos.
Hasta los
católicos ortodoxos atienden a veces sesiones espirituales o los de sectas
pentecostales canalizan mensajes angelicales,
Muchos
fieles cantan y bailan en honor a Dios, la Virgen, los ángeles y/o los santos
de su devoción, van a misas y comulgan, conviven con otras personas que viven y
ven de otra manera a la religión pero que hacen el bien.
Todos los
miembros de asociaciones espiritistas como los de sectas se consideran buenos
católicos, porque llevan la religión en base a La Biblia, palabra de Dios.
Punto de diferencia
En el
curo de las 4 últimas décadas se han formado en Venezuela muchos grupos de
pentecostales tanto en las áreas urbanas como en barrios, pueblos, montañas,
cerca de las playas, caseríos y ahora por la pandemia, han llevado su manera de
predicar la religión a través de las redes
sociales.
Más hay
puntos de inflexión que crean diferencia y división, con los argumentos buenos
o malos que se pueda tener. Por ejemplo existen algunos grupos evangélicos, los
Testigos de Jehová, pentecostales
que rechazan las imágenes, el culto a los santos y/o ánimas, las fiestas
religiosas o personales.
Algunos
consideran que esas son cosas del demonio. Existen quienes no aceptan a los
musulmanes porque en su religión las niñas y mujeres son vilipendiadas o creen
en el sacrificio personal o de otros en nombre de su religión.
Muchas
veces se olvida que hay más de bueno en la religión y por ende puntos de
encuentro, que en estar buscándole el mal a quien no lo hace.
La interpretación
de La Biblia y los textos sagrados es difícil, pero amar, tolerar, perdonar,
convivir, no tanto. Y eso es lo que quiere y busca toda religión, no la
desvirtuemos más.