Oh,
glorioso San Edmundo, tú que fuiste un rey justo y piadoso, intercede por
nosotros ante el Señor. Protege a las viudas y a los huérfanos y concede a
todos los que te invocan la gracia de vivir en justicia y paz.
Que
tu ejemplo de valentía y fe inspire a todos a seguir el camino de la rectitud y
la devoción. En tus manos –mí Señor- y en las manos de tus santos ángeles,
confío mi alma este día, la de mis parientes, mis benefactores, mis amigos y
enemigos y a todo tu pueblo católico.
San
Edmundo, mártir y defensor de los desamparados, te pedimos que nos guíes y nos
fortalezcas en nuestras dificultades. Que tu espíritu de sacrificio y amor nos
acompañe siempre, y que podamos encontrar consuelo y esperanza en tu
intercesión. Amén.
Sobre San Edmundo Rey
San
Edmundo, también conocido como Edmundo
el Mártir, fue un rey de Anglia Oriental, un antiguo reino anglosajón en lo
que hoy es Inglaterra. Nació en el año 841 y comenzó a gobernar a los catorce
años en el 855. Es venerado como santo por las iglesias católica, ortodoxa y
anglicana.
Es
conocido por su justicia, equidad y caridad, especialmente hacia los
necesitados, viudas y huérfanos. Durante su reinado enfrentó invasiones
vikingas y a pesar de ser capturado por estos, se negó a renunciar a su fe
cristiana.
Fue
martirizado en el año 870, siendo azotado y muerto a flechazos. Su festividad
se celebra el 20 de noviembre.