Mostrando las entradas con la etiqueta arcangel gabriel. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta arcangel gabriel. Mostrar todas las entradas

martes

Oración a los Santos Ángeles Custodios

Los Ángeles Custodios son seres celestiales que nos protegen y guían por el camino de Dios. Aquí compartimos algunas oraciones para invocar su ayuda y agradecer su presencia:

Ángeles Custodios

Oración al Ángel de Dios

Ángel de Dios, bajo cuya custodia me puso el Señor con amorosa piedad, a mí que soy vuestro encomendado, alumbradme hoy, guardadme, regidme y gobernadme. Amén

 

Oración del Himno de Laudes al Santo Ángel de la Guarda

Ángel santo de la guarda, compañero de mi vida, tú que nunca me abandonas, ni de noche ni de día.

Aunque espíritu invisible, sé que te encuentras a mi lado, escuchas mis oraciones y cuenta todos mis pasos.

En las sombras de la noche, me defiendes del demonio, tendiendo sobre mi pecho tus alas de nácar y oro.

Ángel de Dios, que yo escuche tu mensaje y que lo siga, que vaya siempre contigo hacia Dios, que me lo envía.

Testigo de lo invisible, presencia del cielo amiga, gracias por tu fiel custodia, gracias por tu compañía.

En presencia de los Ángeles, suba al cielo nuestro canto: gloria al Padre, gloria al Hijo, gloria al Espíritu Santo. Amén

 

Oración a los ángeles custodios para protección

Querido ángel custodio, hoy quiero pedirte que me protejas de todo mal y peligro. No permitas que nada ni nadie afecte mi integridad. Cúbreme con tus sagradas alas para que las malas acciones no me logren alcanzar.

Que toda la maldad se aparte de mí alrededor y únicamente prevalezca mi bienestar. En ti confío, porque el Señor te encomendó la misión de protegerme en todo momento. Por eso, tengo la certeza de que a tu lado encontraré la paz y el descanso.

Amado ángel guardián, no me desampares ni de noche ni de día, ya que bajo tu cuidado podré cumplir todos mis propósitos sin que nada me someta. Amén

 

Oración a los ángeles custodios para pedir un deseo difícil o imposible

¡Oh! Benditos ángeles del cielo, mensajeros del Señor y portadores de sus milagros, vengo a implorar su intercesión para que me concedan este deseo (menciona tu deseo) que tanto anhelo y necesito en mi vida.

Sé que para ustedes no hay nada imposible y que siempre están dispuestos a escuchar las súplicas sinceras de los hijos de Dios. Por eso les ruego que lleven mi petición ante el trono del Altísimo y le pidan con amor y humildad que me favorezca con su gracia infinita.

¡Oh! Queridos ángeles, no me abandonen en esta hora de angustia y desesperación; al contrario, fortalezcan mi fe y esperanza para que pueda confiar en el poder divino y recibir la respuesta a mi oración. Amén.

Recop.: Lcdo. Argenis Serrano

 

jueves

El Arcángel Gabriel

Es recomendable rezar algunas oraciones dedicadas al arcángel Gabriel (Dios es mi Fortaleza), por ser este el más puro de los arcángeles, ya que es el que anuncia el advenimiento de Jesús; su principal atributo: Ayudar en la concepción y proteger en los nueve meses de gestación.

Es el arcángel que armoniza a las personas furiosas, fomenta las buenas relaciones familiares, atrae a las personas distantes, es uno de los arcángeles más poderosos, porque el arcángel Gabriel es uno de los que está más cerca de Dios, por lo cual invocarlo es llenarse pureza y perfección.

De hecho, se dice que desde la antigüedad el arcángel Gabriel que custodia a los Cuatro Ángeles que guardan los elementos principales: Agua, Fuego, Tierra y Viento.

También se le conoce como el embajador de la humanidad, es el Ángel de la Revelación, comunicarnos con él nos fortalece, hace renacer nuestro niño interno, nos alimenta.

Su color: Blanco

Su día: Miércoles

Su aceite: Jazmín

Su aroma: Jazmín

La celebración al arcángel Gabriel es el 24 de marzo.

arcángel gabriel


Carta del Arcángel San Gabriel, Para Ti

Defensor de la Iglesia y Abogado de los Hombres

Yo soy el arcángel Gabriel, para mí las noches y las tardes son el día; conozco los secretos de los tiempos y también el límite de lo infinito, veo la luz de las estrellas y leo en ellas, observo los rayos del sol y la luna y percibo la grandeza del creador, mío es el escudo y la espada mortal, yo llamo por su nombre a los que nacen e ignoro a los que mueren haciendo desde su corazón el mal.

Guío en la vigilia y en la dimensión de las distancias, contemplo a los niños y a los ancianos así como a las mujeres buenas y los hombres honestos.

Rezo con El Eterno y miro y no toco, pues el toque del arcángel Gabriel es luz para los que tuvieron venda y mordaza; soplo y mi alentó sostiene los pasos extraviados.

Bendigo a la viuda solitaria, conforto a los huérfanos, estoy detrás de los marineros de aguas cristalinas y los que navegan en azules mares; pongo y quito la nube y elogio la grandeza del claro firmamento.

También en muchas ocasiones, al que injustamente pisan, con mi silencio devuelvo el pisotón. En las montañas consuelo al soldado de pasos perdidos y por igual hago reflexionar al guerrillero. Estoy a la vuelta del camino y espero al distraído.

Yo soy el arcángel Gabriel, el de la ascensión, doy amor a los enfermos, en dulce secreto de la acacia; a los que cantan o vociferan para el mal o alabando al que hace daño, les amonesto y a los que piden pan y justicia les doy el tono del bienestar, acompañándoles con la música del viento.

Pongo la lluvia después del sol y junto a mi hermano el soberano San Miguel Arcángel, forjo y hago los días del alfarero.

Rocío polvo en los necios e irradio a los malvados, no acepto las bajas pasiones y severo soy con los ambiciosos que sólo piensan en sí mismos y van por el mundo pisoteando a otros para conseguir sus nefastos logros.

Mi manto es blanco para consolar al afligido y miro bien los ojos de los niños y de sus hermanos. Exijo piedad ajena al sacrificio, compenso el lamento en la ensenada de las patrias y muchas veces en la patrulla perdida, en la barcaza o el navío, guío al timonel por aguas seguras.

Veo los principios de mi Padre Celestial y devuelvo la maldad en número de muerte. Saludo al hombre que es leal a su bandera, soy vigilante de las mujeres buenas y pongo coto a cualquier abuso en contra de ellas.

Mi espada corta la cabeza del rufián, yo conozco las puertas de cualquier ciudad en oriente y occidente y digo con la anuencia del Eterno: Quién vive. Y el que no responda no entra ni sale más de ellas.

Escolto a los infantes en los buques y a veces los años son para mí siglos y los siglos son milenios en los mares o en los ríos.

Los ángeles de la guarda que yo, el arcángel Gabriel, pongo detrás de quien yo quiera, son fuertes y fieles protectores, en las dificultades y en los reveses, en lo que parece inalcanzable.

Hago a mis hombres y mujeres salir bien de toda empresa y castigo al que blasfema y se burla por sutil que su comentario sea y pongo las tinieblas sobre su cabeza.

En la sapiencia que el susurro enseña digo al neófito: no escuches consejos de malvados y no pretendas nunca enderezar entuertos que no son propios de ti. No pierdas el tiempo en tonterías o ambigüedades, ocúpate por ser próspero, útil y feliz.

Yo el arcángel Gabriel te prometo ser tu compañía en la senda, no olvides que soy calendario de El Dios Eterno, junto a la balanza de mi hermano Miguel, donde él sentencia y yo también.

En las noches en que la madre espera el retorno de sus hijos o quizá cuando alguno de ellos esté enfermo, advierto que estoy detrás de ella. Por igual soy dueño del dinero y del poder, aunque para mí eso es efímero.

La belleza doy de la razón y la conciencia, pero también las quito a quien no las sustenta. No nombro al falso o falto de sinceridad, sencillamente comparo el linaje de mis rayos en su alma y veo de qué color es la de cada quien.

Cuenten conmigo, porque el arcángel Gabriel siempre estará con los humildes y con su dignidad; puedo abrir las puertas del infierno a quien les atormente o con sus necesidades juegue, no demuestro ni me jacto de nada, pero cuando me llaman, aparezco.

Enseño mis augustas doctrinas en el camino recto. Alejo de los sitios indebidos vistos mal por El Eterno y por mí a todo el que sea recto, arrepentido, digno y por sobre todo, humano.

Doy refugio a las buenas costumbres y rechazo la esclavitud y la condeno en los cielos y en la tierra; distancio al traidor mucho antes de su fechoría y la modestia del señorío coloco a los estrados de El Eterno.

La divisa del arcángel Gabriel es el bien, mi honor es mi enseña, mi canto es el azul del cielo y la lluvia en la tierra a quien la abona.

arcángel gabriel


Ritual para invocar al arcángel Gabriel

Retirarse a un espacio tranquilo, esto puede hacerse antes de dormir; tratar de relajarse, cerrar los ojos, concentrarse, pensar en un lugar fresco, puede ser una cascada, una montaña, respire profundamente, aspire por la nariz y exhale por la boca, trate de visualizarse en un sitio lleno de luz muy blanca, llame al arcángel Gabriel, repita este ejercicio cuantas veces crea necesario con todos los Arcángeles, ellos llenarán su vida de Salud, Fortaleza, Amor, Paz, Sabiduría y Armonía.

Petición al arcángel Gabriel

Mensajero de los cielos, guardián de los niños, ampara y protege a mi niño interno, no permitas que me amargue, que sea siempre alegre, que mi misión sea dar lo mejor de mí y de ello en mi entorno y mi país consigan y reciban buena y justa utilidad; concédenos el poder ser buenos padres y así alcanzar la paz que reside en el Altísimo.

Lcdo. Argenis Serrano

Entradas populares